Cuando vine a recogerlas sólo había guardado 3. Me dijo que no merecía la pena, que no se podía hacer nada, me mosqueé un poco pero ya no había remedio.
De la primera que restauré no tengo foto del antes, pero cuando el constructor la vió restaurada no se lo podía creer y me pidió mis perdones.
La tengo puesta en la sala. Así es como quedó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario